lunes, 19 de mayo de 2008

El campo del (no) abuelo

Contaba un amigo que su padre se iba a dar paseos y volvía con un saco de patatas o de aceitunas y decía que venía del campo del abuelo. Cuando mi amigo creció iba con su padre de paseo y en una vuelta del camino el padre le condujo hasta el interior de un campo y cogieron hortalizas. Al llegar a su casa el padre le habló a su esposa. Mira lo que hemos traído del campo del abuelo. Mi amigo lo comprendió todo, no había ningún abuelo, por lo menos suyo, lo que sí que tenía era un padre gitano de pura cepa.

Con el tiempo mi hermana ha sacado la vena gitana de la familia y sale con su vecina por los campos de Granada a pasear a sus perritos y alguna que otra vez traen la cena del campo del abuelo.

2 comentarios:

ve dijo...

jajjajaja, qué apañadas!!!! Espero que no las pille el dueño del campo en cuestión, ya lo veo con el garrote en la mano... (esto lo he visto aquí en los de manzanas)

Unknown dijo...

Qué bueno, la verdad es que la vecina es de la tercera edad, no sé yo si les saldría más a cuentas entregarse o echarse a correr.